sábado, 25 de enero de 2014

Último brindis



Bebo por la casa destruida,
por mi vida terrrible,
por la soledad entre los dos
y por ti yo bebo.
Por la mentira de los labios traicioneros,
por el frío mortal de los ojos,
por el mundo brutal y tosco,
por lo que Dios no salvó.



De  Anna Ajmátova

No hay comentarios:

Publicar un comentario